El balcón de la sede del Partido Popular (PP) de la calle Génova quedó la noche electoral vacía. A pesar de ser el partido más votado de España, en casa de los populares no había cuerpo para fiestas.
La megafonía y toda la parafernalia que antaño agitaba a las masas hasta alcanzar el éxtasis con la aparición del líder del partido entre banderas españolas y toda el cúpula del poder popular se ha recogido esta vez para no evidenciar la tensión de las costuras.
Puedes leer el artículo completo en Valenciaplaza.com en el siguiente enlace: