Cualquier aventura exige táctica y estrategia y eso también vale para la aventura de llegar a fin de mes. Contar con un presupuesto limitado obliga a aguzar el ingenio y es más que necesario echar mano de herramientas que faciliten mantener un control de los ingresos y los gastos.
Cuando se habla de marketing, muchas veces se nos olvida que una de las obligaciones de quien asume cualquier cuenta o responsabilidad es cumplir con un presupuesto y conseguir hacer más con menos. Es habitual decir que una organización, un partido o un país es “como una familia” y, aunque hay familias de todos los tipos, no hay ninguna que se escape a la necesidad de gestionar sus ingresos y, sobre todo, sus gastos.
Precisamente, un grupo de emprendedores españoles han puesto en marcha una aplicación que vale para las finanzas personales y nos sirve de percha para estas instrucciones. La lógica de la app es sencilla, pero cargada de razón: «Si quieres cambiar algo, empieza por medirlo y, después, corrige». Esta herramienta es Ahorro.net (disponible vía web y móvil en los sistemas operativos IOS y Android) y sus servicios pueden servir de modelo para esta lista de recomendaciones.
1.- Cómo estamos ahora
Lo primero que hay que hacer es contar con un histórico de gastos y saber cuánto y en qué se gasta el dinero recurrentemente, tomando una visión 360º de tus finanzas. Ahorro.net lo hace por medio de informes personalizados y gráficos que permiten llevar un registro de gastos, ingresos, variaciones del patrimonio y del balance de las cuentas.
2.- Cada cosa por su nombre
Para coger bien el toro por los cuernos, hay que saber qué se tiene entre manos, es lo que se denomina ‘categorización inteligente’, esta app traduce los gastos “al cristiano” de forma automática para saber en qué se está gastando exactamente el dinero que gestionamos.
3.- Nada de improvisaciones
Los gastos fijos tienen una fecha y un contante previsible, por lo que no hay excusa para que pillen de improviso. En ese sentido, es necesario guardar y realizar un seguimiento de todos tus recibos en un solo lugar y contar con alertas en el móvil o al correo electrónico con antelación para evitar el riesgo de entrar en descubiertos o que el banco devuelva el recibo.
4.- En guardia con los imprevistos
Hay que estar pendiente para anticiparse a las incidencias con tiempo suficiente para remediar los problemas antes de que ocurran. Lo inevitable no tiene por qué ser inasumible.
5.- Controlar las ‘fugas de agua’
Una de las cosas que más mosquean son las comisiones injustas o inesperadas y, si se trata de las provocadas por estar en descubierto aún más. Precisamente los servicios para el control de esta situación es uno de los aspectos por los que sacan más pecho desde Ahorro.net… y con razón.
6.- Nunca dejar de aprender a ahorra
Existen muchas plataformas que facilitan información, pero vuelvo a poner el ejemplo de esta app por su servicios de trucos de ahorro personalizados en función de los gastos del usuario (y muy bien explicados, por cierto). En su caso analizan a cientos de productos financieros y proveedores para recomendar los que aportan un ahorro más grande según los hábitos de consumo.
No suelo recomendar aplicaciones, pero cuando algo está bien hecho y entiendes que puede ser útil para mucha gente, creo que es un error no hacerlo. Juzgad nosotros mismo.
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